Todos conocéis (o debéis conocer) unas de las obras más importantes (y bellas) escritas para chelo solo: las seis suites compuestas por Johann Sebastian Bach. En una antigua entrada ya os enseñé cómo suenan y algunos de vuestros compañeros ya las han tocado en audiciones. Otros las tocarán en el futuro, seguro.
Bueno, el caso es que el cuaderno donde Bach compuso estas obras se ha perdido (no os pasa sólo a vosotros) y sólo quedan copias de gente cercana a él. Entre ellas, las de su mujer: Ana Magdalena Bach.
Y ¿qué pasa? Pues que antiguamente no había fotocopiadora, así que las copias había que hacerlas escribiéndolas a mano otra vez, con los consiguientes errores al hacerlo. De entre todas las ediciones, una de las más "fidedignas" y cercanas al pensamiento del compositor es la copia que Ana Magdalena hiciera de las suites.
Y diréis: ¿por qué es tan importante este hecho? ¿Por qué se
pone en el blog? La razón es que al no haber copia original del autor a
veces hay notas, arcos y otras anotaciones que no coinciden entre las
ediciones y no sabemos cuál es la que Bach, uno de los mayores músicos
de todos los tiempo, llegara a escribir para su obra.
En este enlace tenéis a vuestra disposición los manuscritos que se conservan, ya de casi 400 años, donde podéis fijaros en cómo escribían la música (sin ordenador) y otras anotaciones como alteraciones, arcadas, calderones, etc.
http://www.wimmercello.com/bachms.html
Es increíble.Estos manuscritos tienen algunos errores pero eso no importa.Su mujer realizó unas copias extraordinarias.
ResponderEliminarY pensar como un manuscrito puede conservarse tanto tiempo..sobre todo después del desconocimento que se tuvo de Bach después de su muerte...
ResponderEliminarincreible como se conservan aun muchos manuscritos originales de musica antigua
ResponderEliminarSon impresionantes estos manuscritos.Muy bonitos.
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